MANUALIDADES MEDITATIVAS

Las manualidades son trabajos realizados con las manos, con o sin ayuda de herramientas, a partir de una material prima procesada o prefabricada. En mi caso, se realizan exclusivamente con materias primas naturales, de primera calidad, teñidas con productos ecológicos y no tóxicos.

Generalmente se busca al realizarlas un avance personal, una creatividad casera, una manera de desconectarse de la rutina diaria. Al trabajar con nuestras manos y nuestra mente, transformando la material en lo que va a ser nuestra obra, que será única e irrepetible, obtenemos una realización personal que nos llena de satisfacción.

Tienen además un añadido: la naturaleza rítmica y repetitiva de muchas de ellas, como cardar, tejer, coser, etc… es calmante, reconfortante y contemplativa. No requiere de mucho esfuerzo comprender cómo realizarlo es una maravillosa práctica de mindfulness (atención plena y consciente), o una forma de meditación.

La investigación muestra que el tejido y otras formas de manualidad textil como la costura, el bordado, el cardado de la lana, el crochet y otras muchas, tienen mucho en común con la atención consciente y la meditación el hecho de que tienen un impacto positivo en la salud mental y el bienestar. Realizar manualidades es entrar en un estado presente, de flujo, un estado de concentración completa en la actividad y situación. Las manualidades y el estado de ánimo repercuten sobre el cerebro. Algunos de los efectos benéficos que se obtienen son la relajación, la mejora de la depresión, el alivio del estrés, la mejora del estado del ánimo, un mejor estilo de enfrentar la adversidad y el fomento de la creatividad. Tienen beneficios psicológicos, emocionales, sociales y espirituales, cuanto más se practica más tranquilos nos sentimos, menos tristes y ansiosos y sentimos más confianza, lo que repercute directamente en nuestro bienestar y nuestra calidad de vida. Eso es lo que demuestran muchas de las investigaciones realizadas al respecto.

Uno de los puntos más significativos de los estudios es que las personas que realizan manualidades en grupo obtienen aún mayor beneficios que los que las realizan en solitario, poniendo el énfasis en que las habilidades y sentimientos experimentados al realizar las manualidades, se pueden utilizar para facilitar la comunicación entre los miembros que las realizan juntos. Algunos resultados que se obtienen de realizar manualidades son: el desafío mental y la resolución de problemas; la conexión social; la plenitud; el desarrollo de la coordinación mano-ojo, percepción espacial y destreza motora fina; el aprender y enseñar; la atención plena al centrar la atención y los pensamientos en una sola tarea; el fomento de la creatividad; el sentido de orgullo y logro; la práctica y perseverancia; la facilitación de la formación de la memoria y su recuperación.

Esta vertiente de mi trabajo, me resulta muy interesante, pues en los talleres de manualidades se pueden crear grupos muy potentes y hermosos, de gente que al desarrollar la creatividad se divierte y por tanto se desinhibe y crece como persona, al mantener un contacto periódico se conoce e incluso se puede llegar a incorporar momentos de meditación grupal.

Durante muchos años viví en Latinoamérica, en diferentes lugares, allí me formé con uno de los grandes tapicistas latinoamericanos. De él aprendí técnicas maravillosas de teñido, diseño y elaboración de tapices, y aprendí a trabajar la lana entre otros muchos materiales. Junto a él descubrí lo fundamental que es trabajar con todo lo que sea natural. Paralelamente aprendí cestería botánica. En los años que viví en allí, participé en exposiciones, muestras y ferias de artesanía. Fue algo muy hermoso.

De vuelta en España me formé en Manualidades de Pedagogía Waldorf, y descubrí que a cualquier niño, de cualquier colegio, de cualquier edad y raza le gustan estos trabajos, pues se realizan con mucho amor, con materiales naturales y artesanalmente. Cuando empecé a cardar, hilar y teñir mi lana experimenté con el diseño de gorros de ganchillo, mezclando diferentes texturas y calidades de lanas con sedas, alpacas, etc., me gusta mucho el afieltrado de la lana, mojado y especialmente lana cardada, peinada y en cinta con aguja de afieltrar. Realizo muñecas (y muñecos) en sus diferentes versiones (muñecos de lana y fieltro para teatrillos, muñecas grandes y pequeñas en tela de piel, en terciopelo, hadas, animales…). Estos muñecos tienen un trabajo muy preciso y detallado, un relleno compacto, unas cualidades únicas, para que los niños puedan realizar la inmersión en su mundo con total garantía.

He realizado numerosos talleres en colegios y en casas particulares con grupos de padres. Vendo en diferentes tiendas, por encargo, y en ferias de artesanía. También vendo los materiales con los que se realizan, que son muy especiales y no siempre fáciles de conseguir.

Te invito a que mires algunos de mis trabajos, es una pequeña muestra para que te hagas una idea de lo que podemos llegar a hacer.

Profesional:

NAIA ARANCIBIA

Me llamo Naia, tengo 49 años, vivo en Cantabria, en un pueblo cerca de Santander, estoy casada con un hombre que me apoya completamente en mi proceso y en mi vida, tengo dos maravillosos hijos, aún pequeños, un largo camino recorrido y ganas de compartir lo aprendido. Tras aceptar mis dones y talentos, los he adaptado a la formación que en las últimas dos décadas he adquirido. Actualmente me dedico a acompañar a las personas en su despertar de la conciencia, ofreciéndoles apoyo en la Integración del Ser que somos.

Digamos, de manera sencilla, que desde pequeña tengo desarrollado un don, que todos poseemos, pero que muchos aún no lo han despertado, que es la capacidad y posibilidad de comunicación con los Planos Invisibles. Lo he tenido siempre, sin embargo no lo había hecho público, porque no lo tenía aceptado ni integrado. Hoy día creo que es parte de mi misión hacerlo, y dar a conocer aquello que no podemos ver, pero está aquí mismo, a la par que aportar luz a lo que nos ocurre en esta vida, que tantas veces no comprendemos y nos encadena, produciéndonos dolor y sufrimiento, y no permitiéndonos Ser Quienes Realmente Somos.

En estos maravillosos momentos en los que estamos experimentando una elevación de la frecuencia vibratoria tanto del Planeta como de cada ser humano, tenemos una oportunidad única de desprendernos de aquello que ya no nos sirve, pero para hacerlo hay que conocerlo, integrarlo y aceptarlo, para luego soltarlo. Eso significa Despertar y Tomar Conciencia. Todo ello nos lleva al Encuentro con nuestro Ser Superior.

Los cuatro cuerpos inferiores que forman nuestro Ser: el Físico, el Mental, el Emocional y el Etérico, nos permiten conocer qué es lo que está desajustado en cada uno, para poder realizar el trabajo necesario para integrarlos y contactar con los cuerpos superiores -espirituales- que vibran a otras frecuencias más elevadas. Gracias a este don, a mi formación y a mi experiencia, he podido articular en cuatro modalidades diferentes que abarcan cada cuerpo, aquellos aspectos en los que podemos trabajar para realizar el logro de la Integración.